Me llamo Lorena y soy infinitamente curiosa.  Soy una buscadora convencida de que somos mucho más de lo que creemos y de que la vida tiene mucho más que ofrecernos de lo que parece a simple vista. Me encanta aprender y esta curiosidad incansable  me ha llevado a adentrarme en muchos caminos distintos (Generadora Manifestante + canal de la Curiosidad activado).

Estudié Filosofía en la universidad con la esperanza de encontrar grandes respuestas a grandes preguntas (spoiler: ahí no era);  profundicé en Filosofía de las Religiones y en Filosofía de la Estética, lo Divino y la Belleza, y me he dado cuenta con el paso de los años que eso me ha acercado más a lo que buscaba. Creo en un Poder Superior que escapa a cualquier forma de compresión intelectual y admiro la Belleza en todas sus formas. También me formé como instructora de mindfulness especialista en  MBSR (Reducción del Estrés Basada en Mindfulness). La meditación ha sido otro camino que me ha acercado a esas grandes respuestas y que me parece una vía directa para conectar con nuestro Ser más profundo. 

Mi camino espiritual y de autoconocimiento siempre ha sido prioritario para mí. He tenido la suerte de contar con la guía de increíbles maestros y maestras, quienes me han enseñado lecciones invaluables en este viaje, la vida ha sido la mayor maestra. Pasé una época tan tan tan difícil en mi vida que en ocasiones parecía imposible de creer que fuera real; era como empezar a correr una maratón justo cuando hacía un instante había acabado otra, y así varias veces. Por otro lado, he trabajado varios años en la cárcel y en entornos marcados por mucha pobreza y marginalidad, lo que me ha permitido ver otros lados de la realidad. 

Mi manifiesto

Si hago el ejercicio de destilar todo lo que he aprendido y me han enseñado, puedo resumirlo en una especie de manifiesto personal o declaración de intenciones: Considero que lo más inteligente que podemos hacer es rendirnos y entregarnos al Misterio, no a modo de derrota, sino de asombro. Somos parte de esta maravilla de universo, tenemos una dignidad inmensa aunque siempre estamos agarrándonos a un clavo ardiendo porque no somos conscientes de nuestra grandeza; somos como elefantes amaestrados por hombres debiluchos que nos atan y vivimos sin saber la fuerza y el poder que poseemos en nuestro interior. 

Creo que debemos empeñarnos en despertemos a otra realidad, descubrir nuestro poder y nuestra nobleza, saber quiénes somos realmente y lo que de verdad anhelamos; dejemos de perseguir lo que otros dicen que es lo mejor para nosotros y que durante el camino a alcanzarlo o cuando lo conseguimos solamente nos llenan de frustración, de cansancio, de tristeza o de nada. No seamos como un rebaño que sigue al que tiene el cencerro, sigamos nuestro propio cencerro, nuestra propia música y no traicionemos nuestra música. La singularidad de cada uno ¿qué otro sentido puede tener sino mostrarla y compartirla con el mundo como nuestra aportación?. 

Una sensación de libertad, de ligereza, de alegría y de paz son para mí señales inequívocas de buena salud espiritual y de que estoy en el camino correcto para mí; tomarme demasiado en serio, la rigidez, contagiarme de la prisa y dudar de mi voz interior son las señales de lo contrario. Procuro abrir la lente de mi perspectiva todo lo que puedo y más, y, como el título de un poema de Ra Uru Hu el fundador de Human Design, procuro sobre todo "perseguir la risa".

Mi historia de amor con Human Design

Human Design me encontró de la manera que menos se espera que te encuentre algo que te va a transformar tanto. La pieza que estaba deseando encontrar no me encontró en un retiro, o en medio de la naturaleza y del silencio, ni a través de un libro, me encontró en una calle atestada de gente comprando los regalos de Reyes mientras escuchaba un podcast que no tenía nada que ver con autoconocimiento ni espiritualidad, pero cuando hicieron referencia al sistema de Diseño Humano, sentí lo que suelo sentir cuando he encontrado oro.  No se me quitó de la cabeza hasta que llegué a casa y pude ponerme a investigar. 

Ahí recordé que hacía mucho años ya había oído hablar de eso, pero desde la ignorancia y la poca información que encontré en una búsqueda de 5 minutos en Google, pensé que era simplemente otro sistema de análisis de la personalidad, de esos que te meten en una caja y hacen que te llenes de limitaciones y que te llevan a identificarte con lo que realmente no eres tú.  Así que pasé de largo.  Pero esta vez fue diferente. Comencé investigando por mi cuenta y cada día me sorprendía más y me sentía más fascinada por el sistema, descubrí que muchas cosas que pensaba que tenía que cambiar o mejorar en mí simplemente eran parte esencial de mi Diseño y por eso nunca conseguí cambiarlas a pesar de mis muchos intentos.  Luego, viendo que era muy difícil llegar a una comprensión más profunda solo por mi cuenta, decidí invertir en lecturas y la guía de expertos y mi fascinación fue a más, igual que la transformación en mi vida; dejé de sentirme mal por cosas por las que había sufrido a lo largo de los años, me sentí con ganas de activar y experimentar con todos los dones y fortalezas que decía mi Diseño que tenía, empecé a entender mi papel en el mundo, empecé a comprender mejor a los demás, entendí cuál era mi manera óptima de funcionar y empezó a ser todo más fluido y más sincrónico; era como un puzzle donde todas las piezas iban encajando y ya podía intuir un maravilloso paisaje. Y Human Design me atrapó más y me enamoré tanto que acabé certificandome como como lectora. 

Mi trabajo como lectora

Este trabajo me entusiasma de manera muy profunda porque estoy convencida de que el Diseño Humano es una herramienta transformadora que puede cambiar nuestra visión de nosotros mismos y de nuestras vidas y me siento honrada de poder acercarla a todas las personas que se sientan llamadas a ser parte de este sistema. Human Design nos devuelve a nuestra autenticidad y a nuestra verdadera naturaleza desde el más absoluto reconocimiento como piezas esenciales en el mundo,  desde la más absoluta autoaceptación y descubriéndonos que no hay nada mal en nosotros, que no somos defectuosos y que no tenemos que llegar a ser como nadie, sino que tenemos que conocer quienes somos realmente y simplemente ser nosotros mismo.

Me emociona descubrir hasta dónde podemos llegar y reconocernos en esencia como seres Divinos, co-creadores de esta realidad que va más allá de todas nuestras creencias limitantes y que está llena de abundancia y juego. Además Human Design se complementa perfectamente con otras prácticas espirituales, así que ofrezco todo mi conocimiento acerca de este sistema y de cómo se puede integrar en la vida de una manera práctica sirviéndome también para implementarlo en nuestro día a día de herramientas de otras tradiciones y caminos espirituales.

 Si resuenas conmigo, estaré encantada de acompañarte en tu propio viaje de autodescubrimiento y de ayudarte a despertar y a abrazar tu auténtico potencial. Me encantaría ayudarte a través de Human Design a desvelar las capas ocultas de tu Ser, a descubrir el potencial ilimitado que reside en ti y a seas consciente de todo tu poder.

Te deseo todo lo mejor.

Con amor, 
Lorena